El partido fue parejo hasta que llegó Juani, y puso a la visita en ventaja de un hombre, a partir de ahí el partido fue un 4 contra 5. El calor apretaba a los dos conjuntos.
A pesar de la diferencia los locales no se dieron por vencidos, complicaron a la visita en algún tramo del partido, pero todo dentro de un desorden táctico, encima acompañado por el mal rendimiento que vienen mostrando algunos jugadores. Como Maiquel que esta es su 5ª derrota al hilo.
Tenemos que decir que la visita se erró muchos goles, Leo, Gus y Juani, tenían la mira desviada, se erraron goles hasta con el arco solo.
Los locales no ofrecieron ninguna resistencia al Tuiti lo pasaban como poste, y Bruscheta miraba de atrás. En un momento la tribuna se preguntó si Bruscheta estaba arbitrando el partido, hasta que fue a atajar al arco, que todavía no se para que.
El caso de Vítor zafa de la crítica, que hizo 6 goles de los nueve de su equipo, pero le falto correr un poco más, parece que antes le tiene que pedir permiso a la mujer.
Un partido que quedará en la historia, un 9 a 12 marcado a fuego y que abrió la puerta a muchos científicos para que investiguen como jugar con un hombre de menos y no ser apabullado por el adversario.
A pesar de la diferencia los locales no se dieron por vencidos, complicaron a la visita en algún tramo del partido, pero todo dentro de un desorden táctico, encima acompañado por el mal rendimiento que vienen mostrando algunos jugadores. Como Maiquel que esta es su 5ª derrota al hilo.
Tenemos que decir que la visita se erró muchos goles, Leo, Gus y Juani, tenían la mira desviada, se erraron goles hasta con el arco solo.
Los locales no ofrecieron ninguna resistencia al Tuiti lo pasaban como poste, y Bruscheta miraba de atrás. En un momento la tribuna se preguntó si Bruscheta estaba arbitrando el partido, hasta que fue a atajar al arco, que todavía no se para que.
El caso de Vítor zafa de la crítica, que hizo 6 goles de los nueve de su equipo, pero le falto correr un poco más, parece que antes le tiene que pedir permiso a la mujer.
Un partido que quedará en la historia, un 9 a 12 marcado a fuego y que abrió la puerta a muchos científicos para que investiguen como jugar con un hombre de menos y no ser apabullado por el adversario.
