El jueves 23 de Diciembre del 2010, podremos decir que se disputó el último Niaro de la década, este comentario suena lindo pero es algo errático, el partido no se dio en el Niaro sino que se jugó en otra cancha. No recordamos su nombre pero si que está ubicada en Esteban de Lucas entre BsAs y Bermudez, que tiene alfombra de césped sintético con recortes de caucho, que es techada, y que nos dejó la sensación de ser más chica que el Niaro. Que esta a la vuelta del abominable hombre de las Nieves.
Que puede sonar un poco al colmo de las canchas, ya que frente a ella se encuentran las canchas de 7 y 11 del batallón. No suena a negocio rentable abrir un fútbol 5 frente a una media docena de canchas sobre césped natural.
Todo este cambio debido al plantón que nos hizo nuestro canchero últimamente no muy querido.
Aquel 23 del 12 había sido un día muy caluroso, la previa a Navidad venía recargada, la Iglesia Maradoniana se quejaba por la popularidad en alza de Papa Noel.
Y a todo esto se sumaba un clima de tormenta, la lluvia comenzaba a sentirse en todo Rosario. Llegamos a la puerta del Ñaro y podíamos ver que no había nadie.
Juani y Vitor avisaban que llegaban más tarde. Se trataba de conseguir el gimnasio de la parroquia, se trataba de conseguir una pelota. Finalmente se consiguió todo en Esteban de Lucas, nombre que presagió el matrimonio gay, un Esteban de Lucas, raro para aquella época.
El partido super interesante, por un lado los hermanos Ferrato más Tuiti, y Serenito, por el otro equipo, Juani, Luis, Coco, Chuza, y Leo.
Si ya se lo que pensas, que el primer equipo ganó por robo, pero no, no fue así. Los de Juani, metieron unas buenas Chuzas y ganaron por un gol.
El partido dio para un comentario mucho mejor que este, pero no recuerdo bien todo lo sucedido. Lo que te puedo confirmar que no fue un día más, fue el último Niaro de la década que se cerró el libro del 2000-2010, y a otra cosa. Por ahora no hay revancha. Hasta el próximo decálogo.
